Según el Barómetro del Cemento elaborado por el departamento de Estudios de Oficemen, el consumo de cemento en España cerró 2018 con un crecimiento del 8%, situando la demanda doméstica del pasado año en torno a los 13,4 millones de toneladas.

Estas cifras confirman las previsiones de Oficemen, que por otro lado prevé un crecimiento entre el 3 y el 6% para 2019.

2018 ha sido un año atípico, con altibajos en el crecimiento, que ha pasado de los dos dígitos con los que inició el año, rozando el 12%, a cerrar con tan solo un 8% de incremento, lo que supone un crecimiento de apenas un millón de toneladas en valores absolutos, manteniéndonos en niveles del año 1967”, explica el presidente de Oficemen, Jesús Ortiz.

Durante el tercer trimestre de 2018, se ha revertido la tendencia en la serie histórica y el destino principal del consumo de cemento es la edificación, alcanzando un 55% del total, incluyendo la vivienda y la edificación no residencial, mientras que la obra civil pasa a suponer tan solo un 45%.

En 2018, el gasto del presupuesto destinado a infraestructuras de la Administración General del Estado fue el más bajo de los últimos 25 años, por debajo de los 6.000 millones, que contrastan con la media de 8.600 millones mantenida en dicho período.

FUENTE: oficemen.com